Un nuevo hecho de violencia sacudió la capital. La mañana del viernes 11 de julio fue hallado el cuerpo sin vida de un policía en servicio activo en un terreno baldío del sector de Carcelén, al norte de Quito.
La víctima fue identificada como el cabo segundo Miguel Ángel L. M., de aproximadamente 30 años de edad.
El hallazgo ocurrió alrededor de las 05:45 en la intersección de la avenida Jaime Roldós Aguilera y la Quinta Transversal, cuando un ciudadano que transitaba por la zona notó un bulto sospechoso entre la maleza.
Al acercarse, descubrió el cadáver, con evidentes signos de violencia. El cuerpo estaba cubierto con una cobija, presentaba múltiples heridas de bala y tenía las manos atadas con cinta de embalaje.
Personal de la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida y Muertes Violentas (Dinased) y de Criminalística acudió al sitio para realizar el levantamiento del cadáver y trasladarlo al Centro Forense, donde se realizará la autopsia correspondiente.
El jefe del Distrito Policial La Delicia, coronel Roberto Fiallos, confirmó que el crimen no ocurrió en el lugar del hallazgo. De acuerdo con las primeras investigaciones, el cuerpo fue arrojado desde un vehículo tipo SUV color gris en el barrio Mastodontes.
“Tenemos videos del momento en que se dejó el cuerpo en el sitio”, declaró el oficial. También se analiza material biológico hallado en las cintas utilizadas para atar a la víctima.
El hecho ha generado alarma entre los moradores de Carcelén Bajo y sectores aledaños, quienes expresaron su creciente preocupación por la inseguridad en la zona. Vecinos denunciaron que, desde que se cerró la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) del barrio, los delitos como asesinatos, secuestros y robos han aumentado de forma alarmante.
Este crimen se suma a otros recientes en el mismo sector, como el asesinato de un peluquero ocurrido el pasado 9 de junio frente a una escuela.
La Policía Nacional ha intensificado las investigaciones para dar con los responsables del homicidio de su miembro en servicio activo y reitera su compromiso de garantizar la seguridad en la zona.


















